domingo, 3 de febrero de 2013

#CupidoMata



   «Toni Morrison en su novela Ojos azules dice que la noción de amor romántico es una de las ideas más destructivas de la historia del pensamiento humano. Su capacidad destructiva reside en la creencia de que llegamos a amar sin voluntad ni capacidad de elegir. Esta ilusión, perpetuada por la tradición romántica disponible en abundancia, se encuentra en el camino de nuestro aprender a amar de verdad y honestidad. Para sostener esta fantasía perfecta, seguimos cometiendo el error de sustituir el romance, el enamoramiento, la lujuria, el apego obsesivo y la pasión por el amor. La misma expresión "enamorarse" denota el individuo miedo, temor, fascinación, la duda y la vacilación en la presencia de algo que es inevitable pero no del todo fiable. Atracción erótica puede servir de catalizador para una conexión íntima entre dos personas, pero no es un signo de amor. Porque la pasión sexual compartida puede ser un sustento y fuerza obligatoria en una relación conflictiva, pero no puede ser el campo de pruebas para el amor. El verdadero amor no siempre conduce a los finales felices para siempre, e incluso cuando lo hace, el mantenimiento que se necesita mucho trabajo, esfuerzo y sensibilidad.»

Extraído del artículo de Taru Bhal para The Sunday Tribune



#CupidoMata a través del #AmorRomantico






   La literatura y el cine han contribuido a hacernos creer cosas sobre el amor que en algunos casos nos dañan como mujeres, como personas o como parejas, al comparar nuestras vidas y nuestros amores “reales” con los de las películas y los cuentos. Esos que acaban en el “fueron felices y comieron perdices”.